sábado, 16 de junio de 2007

Callemoslo para siempre

Pido a todo aquel que esté preocupado por la música española que firme la siguiente petición.



CALLEMOSLE PARA SIEMPRE. Es nuestra obligación.

Spread your wings, good music.

martes, 5 de junio de 2007

Calles oscuras


Lo que les narro a continuación ocurrió hace unas cuantas semanas ya, un sábado, aproximadamente a medianoche. Después de disfrutar de un agradable paseo por el marco incomparable como es el paseo marítimo.


A escasas dos manzanas de mi apartamento hay una calle pequeña, donde se suelen agolpar en ambas aceras chatarras que se hacen pasar por coches. Siempre hace un frío terrible y la humedad recuerda a esas casas viejas llenas de masa verde en todas sus paredes.
Cuando cruzaba la calle me encontré intentando distinguir que era aquello que se movía de un lado para otro. En cuanto conseguí distinguir levemente lo que estaba ocurriendo mi cuerpo se quedó rígido, petrificado, en medio de la carretera. No podía hacer otra cosa que quedarme mirando.
El espectáculo que se sucedió fue la más grotesca muestra de inhumanidad de la que he podido ser testigo en toda mi vida. Dos malnacidos estaban persiguiendo a un hombre negro de unos veintitantos gritando '¡Vuelve a tu país, hijo de puta!', '¡Negro de mierda!' y '¡En España no queremos basura como tu!'. Consiguieron hacerle caer al suelo a base de darle patadas. Ya en el suelo intentaron seguir golpeándolo, pero consiguió empujar a uno de ellos y los dos indeseables cayeron al suelo. Salió corriendo pasando a tres metros de mi, por la acera. No me había podido mover un solo centímetro. La escoria humana de los asaltantes se levantó. No hicieron mención por perseguirle pero siguieron gritando barbaridades del estilo durante unos segundos. Continuaron su camino golpeándose mutuamente e incluso empujándose contra las paredes y los coches.

Después de ésto solo tuve fuerzas para llegar al bordillo de la calle y sentarme allí. No se si fue por culpa de la muestra de estupidez que había observado o si mi cerebro se habrá autonegado el oxígeno para no poder asimilar lo que estaba viendo pero empezó a dolerme terriblemente la cabeza. Realmente no se cuánto tiempo pasé allí sentado. Tampoco recuerdo la manera en la que llegué hasta mi habitación. Lo único que tengo grabado de después de los hechos son las horas que pasé encima de la cama pensando en la clase de personas que pueden hacer cosas de ese tipo. Aún hoy sigo sin saber qué tipo de mente enferma tienen esas personas.
Durante las horas que pasé despierto por mi cabeza sólo pasaba una pregunta: ¿Cómo puede ser que un ser humano crea que tiene derecho a insultar, pegar y humillar a otro ser humano por ser de otra raza, religión o país?.
Evidentemente por mi cabeza pasaron las razones por las que el racismo y la xenofobia siempre estuvieron presentes en multitud de culturas y en muy distintas épocas. Por supuesto, ninguna explicación me sirvió para nada.

La realidad siempre será más impactante cuando la ves en vivo y en directo. A todos se nos llena la boca con conceptos éticos y filosofías varias pero cuando la realidad te da una hostia en toda la cara, lo único que puedes sentir es tu cerebro haciendo 'clic', un mareo repentino y cómo se te revuelve el estómago.